-No hagas nada de lo que puedas enorgullecerte.
-Cómo crees, yo no haría algo así.
-Recuerda que los demonios no aleccionamos; bueno, en cierto sentido sí, pero no haré aquí un tratado de demonología
-Por favor, cuando lo haces sos muy aburrido
-Joder, ya te salió lo argentino
-Y a vos lo aleccionador
-Púdrete
-Nah.